lunes, 30 de junio de 2014

El gran experimento biológico que tuvo lugar en la década de los años 90 en EE.UU. fue un fracaso. Sin embargo, se pueden extraer algunas conclusiones que deberían servirnos de aviso para el futuro.

Entre finales de los 80 y principios de los 90 del siglo pasado tuvo lugar un experimento científico de repercusión mundial. Con un presupuesto de 200 millones de dólares, el proyecto Biosphere 2 buscaba ahondar en el conocimiento sobre colonias autosuficientes con el fin, entre otros, de preparar una hipotética y futura expedición espacial. El nombre de Biosphere 2 fue dado porque sus promotores querían que fuera la segunda biosfera autorregulada conocida después de la propiaTierra.
En el desierto de Arizona, cerca de Tucson, se instaló este complejo que ocupaba unasuperficie total de 1,27 hectáreas cubiertas con una estructura de tuberías y cristal que lo aislaba completamente del mundo exterior. Con estas dimensiones se convirtió en el mayor ecosistema cerrado jamás construido.
Biosphere 2 albergaba diferentes hábitats: una selva que ocupaba 1.900 metros cuadrados; un océano de 850 mque incluía un arrecife de coral; un manglar de 450 m2; la sabana con 1.300 m2; un desierto de 1.400m2 y tierras cultivables con una superficie de 2.500 metros cuadrados. Además había un área dedicada al hábitat humano con alojamientos, oficinas e instalaciones técnicas.
Biosphere 2 - instalaciones
Aunque hubo pequeños experimentos previos de pocos días de duración, la gran prueba duraría dos años. Se seleccionó una tripulación formada por ocho personas y estuvieron aislados desde el 26 de septiembre de 1991 hasta el 26 de septiembre de 1993.

Los problemas surgen al poco del inicio del experimento

Durante esta misión aparecieron diversos problemas biológicos con los que hubo que lidiar. La producción de alimentos no fue nunca suficiente para alimentar a la tripulación, y prácticamente durante todo el tiempo que permanecieron aislados, tuvieron una continua sensación de hambre.
Otro problema aún más grave fue la alarmante caída de los niveles de oxígeno que se produjo, pasando de un 20,9% hasta un 14,5% en 16 meses. Esto obligó a que en un momento dado se tuviera que romper el aislamiento exterior para transferir O2 desde fuera de la biosfera. Este problema se produjo por un tiempo inusualmente nublado que redujo la fotosíntesis y por un diseño poco acertado de la estructura exterior que bloqueaba significativamente la luz solar. Posteriormente, también se culpó a la aparición de microbios que proliferaron en exceso y consumieron gran parte del oxígeno.
Biosphere 2
Frente a los grandes retos y avances que se alcanzaron en el campo de la ingeniería y de la biología, quizás lo más destacado del experimento fueron las conclusiones referentes al campo psicológico. Los ocho integrantes de la expedición estuvieron aislados en la infraestructura durante dos años; fue al poco tiempo de iniciarse cuando aparecieron los primeros enfrentamientos que dividieron la tripulación en dos grupos.
Tras esta primera expedición, otro grupo de investigadores se aislaron en la estructura, pero un sabotaje por parte del equipo del primer experimento obligó a cancelar esta nueva expedición. A partir de entonces no hubo más intentos de repetir un asilamiento en Biosphere 2 y en la actualidad es un centro semirruinoso que trata de ser rentable con el turismo y siendo el laboratorio del cambio climático de laUniversidad de Arizona.

Las conclusiones que se pueden extraer de Biosphere 2 pueden ser de gran valor para los científicos, desde la vertiente de la exploración espacial, sobre todo ahora que están en auge los experimentos y propuestas para llevar al hombre a Marte. Por un lado, se aprendió que pequeños cambios en un microclima tienen grandes repercusiones sobre el resto de variables. Estos entornos cerrados son altamente vulnerables a cualquier evento no previsto.
Jane Poynter, una de las investigadoras que formó parte de la primera expedición comentó: “en la Biosphere 2 entendí completamente el gran impacto que tenía en la biosfera, cada día, y esto me impactó mucho, mucho, literalmente”. También para el estudio del cambio climático, las conclusiones del experimento son muy interesantes a la vez que nada halagüeñas.

Conclusiones psicológicas

Por otro lado, se aprendió mucho sobre la psicología del ser humano en situación de aislamiento. Los conflictos surgidos, podrían reproducirse con cierta seguridaden un viaje tripulado a Marte, sobre todo en situaciones de estrés y sin la posibilidad de salir en caso de extrema necesidad, al contrario que ocurría en Biosphere 2.
En noviembre de 2011 terminó el experimento MARS500, en el que se aisló durante 500 días a siete tripulantes que recrearon en un laboratorio de Moscú un viaje de ida y vuelta a Marte. Los resultados fueron muy satisfactorios según los científicos, pero como alguna voz crítica señaló, en situaciones de estrés en un viaje real a Marte los tripulantes no actuarían como en un laboratorio en la Tierra, un entorno controlado del que podrían ser evacuados en cuestión de minutos ante cualquier eventualidad.

La última gran propuesta de viaje a Marte es Mars One, viaje sin previsión de retorno para el que se están seleccionando candidatos de todo el mundo. Pese a lo improbable de dicha aventura, el equipo de seleccionadores deberá tener en cuenta las conclusiones de Biosphere 2 para preparar a la tripulación que manden a Marte.

Conclusiones medioambientales

Los grandes cambios que se están produciendo en la actualidad en la atmósfera terrestre (nuestra biosfera), podrían ser una réplica a gran escala de lo que pasó en Arizona. En aquel caso, fue posible corregir las condiciones transfiriendo oxígeno desde el exterior. En nuestro caso, no tenemos una biosfera superior que nos permita corregir los cambios que estamos provocando en la Tierra.

El acceso a financiación es uno de los mayores desafíos de las empresas españolas. Aquellas compañías que se encuentren en pleno crecimiento y presenten un proyecto atractivo, pueden optar por cotizar en el Mercado Alternativo Bursátil

No sobrevive el más fuerte, sino el que consigue adaptarse mejor al cambio“. Esta frase, que podría considerarse una aplicación directa de la teoría de la evolución deCharles Darwin a la economía, es una de las máximas que deben tener en cuenta las empresas a la hora de resistir una crisis como la que estamos viviendo. El acceso a financiación, cada vez más complicado para muchas compañías, puede solventarse con la venta de acciones de la empresa en el Mercado Alternativo Bursátil. ¿Pero qué es y cómo funciona?
Cuando hablamos de cotizar en la Bolsa, normalmente nos referimos a grandes compañías que deciden estratégicamente proporcionar liquidez a sus accionistas, adquirir notoriedad, obtener financiación o contar con una valoración objetiva del trabajo de la empresa. La Bolsa es una puerta de entrada para inversores nacionales y extranjeras. Pero no es la única.
Debido a que no todas las compañías cumplen con los requisitos de entrada a Bolsa, existen otros mercados en los que las empresas con una reducida capitalización pueden tratar de expandirse, lograr financiación y establecerse con reglas de juego adaptadas específicamente para ellas. Como gran ejemplo destaca el Mercado Alternativo Bursátil, creado en 2008 como sección de la Bolsa y Mercados Españoles (BME), y supervisado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Mercado Alternativo Bursátil
Varias empresas españolas, como la andaluza Bionaturis, cotizan ya en el Mercado Alternativo Bursátil. En un contexto difícil para muchas pequeñas y medianas empresasde gran potencial, el MAB se posiciona como un enclave estratégico. Y es que la financiación no bancaria de PYMES apenas representaba el 22% el año pasado.
Las ampliaciones de capital de compañías que cotizan en el Mercado Alternativo Bursátil es una vía alternativa para obtener financiación, que evitan así optar por la deuda financiera. Las empresas que eligen saltar al MAB suelen contar con dos características propias: por un lado, a pesar de un reducido capital, se encuentran en pleno crecimiento, y por otro, presentan un proyecto empresarial atractivo.
De este modo, en el Mercado Alternativo Bursátil nos encontramos con compañías muy variopintas y de sectores muy diversos. Existen, por ejemplo, empresas ligadas a labiotecnología (Bionaturis, AB-Biotics, NeuronBio o Inkemia-IUCT), a los servicios de consumo (Boda Click, CommCenter, Imaginarium) o a las telecomunicaciones (Altia Consultores, Catenon o Let’s Gowex).
Dado que el acceso a financiación es uno de los desafíos de las empresas españolas, una decisión estratégica y exitosa podría ser cotizar en el Mercado Alternativo Bursátil en el caso de que nuestra compañía crezca y cuente con un proyecto atractivo. Así ofreceremos adecuada transparencia y liquidez a nuestros inversores, una garantía fundamental para seguir apostando por nuestras ideas emprendedoras.
Imágenes | Lif (Flickr), Bionaturis (Flickr)